Hay ventanas que dan a lugares cerrados. Ventanas que no enseñan nada que quieras ver, te cierran la imaginación (menuda paradoja).
Y hay ventanas que dan a muchos lugares que ni siquiera conoces. Ventanas que dan paso a la imaginación.
El verano es como una ventana que da a un patio interior, apesta. Pero siempre llega lo bueno y de repente la rutina es otra, y cada amanecer es una ventana que da a miles de lugares abiertos.
1 comentario:
Tambien hay ventanas que dan a sitios no sólo aparentemente mejores, si no a los uqe de verdad lo son. Yo tego una que da a los carritos de la compra, otra a las conversaciones locas por el messenger, otra a mi locura en si,...
Marcosa y ventanas hay tantos como quieras, lo que de verdad importa es lo que quieres ver a traves. muaaack
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